11:22 pm

No voy a poder venir durante el resto de la semana y no quise dejar el blog huérfanito por tanto tiempo. Todavía le queda media hora al lunes, así que estoy dentro de los límites de mi propósito de ser una blogger organizada. Traje sólo unas fotos para que vean que linda se ve mi ciudad cuando tiene su maratón. En ninguna está Lau porque soy tan pilas como animadora que llegué tarde a los sitios donde se suponía que lo tenía que estar esperando. Después de una investigación que arroja resultados confusos, no sabemos si es que Lau corre demasiado rápido o nosotras caminamos demasiado lento, pero lo cierto es que tuvimos que conformarnos con verlo en la llegada.  El día fue espectacular, la ciudad estaba resplandeciente, el aire fresco y las calles llenas de personas dando ánimo a los corredores.





Una de las mejores cosas del Maratón de Montreal es que la llegada es dentro del estadio olímpico y apareces en una pantalla grandísima mientras anuncian tu nombre y la multitud aplaude como si fueras una celebridad.Marianne y Valeria aplaudieron a su padre en medio del paroxismo total, porque para ellas nadie es más veloz, hermoso y heroico que él.  Luego, a un lado de la meta, (dentro del mismo estadio techado) hay una zona de picnic grande con grama falsa donde corredores y familia descansamos, comimos, bebimos y nos amamos los unos a los otros en una linda burbuja de paz y amor ♥ Tengo mucho sueño y ya ni sé lo que digo, sólo sepan que si no he aparecido en ninguna parte es porque el viernes empezó mi Atelier de Septiembre y lo estoy disfrutando al tope después de millones de problemas técnicos que casi hacen que me tire por el balcón. 
Me despido criaturas.