lunes, enero 30, 2006
Desde China, con amor.
Esta fue mi parte favorita de la fiesta. Wen Jing, sin mucho cuento, cantó Cumpleaños feliz en chino para su amiga Valeria. Entonces se animó Karina en rumano, pero su versión duró como 4 segundos (yo creo que la rumanita nos tomó el pelo). Muertas de la risa, las filipinas Ela y Andrea susurraron lo mismo en tagalog para Marianne. A Monserrat y Mauricio de México les dio miedo escénico, entonces todos desafinamos Las mañanitas por ellos, incluídas las nenas de Ecuador. Es lo fascinante de vivir en Montreal. La mezcla de culturas se manifiesta a todo pulmón en cualquier encuentro y eso hace que uno no se sienta extranjero. De alguna manera loca, estar rodeados de gente venida de todas partes del mundo nos da un sentido de pertenencia inexplicable. En todo caso, la fiesta de ayer me dejó el corazón en almíbar.
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3 comentarios:
¡¡¡Gracias por esas fotos!!! Estuvieron divinas... pensé lo mismo al verlas... ¡qué fusión de culturas! ¡qué realidad tan hermosa!... Me encanta ver crecer a mis sobrinas y digo lo mismo que Katy, yo quiero ser una mamá como tú... ¿me ayudarás?. Los quiero mucho a los cuatro... muchooooooooooooooooooooooooo... Mamín
"un sentido de pertenencia inexplicable", no pudiste describirlo mejor
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