1 km de post (y 4 años de blog)

Ayer este blog cumplió 4 años y si no es porque Gabriel me acaba de decir en un comentario se me pasa por debajo de la mesa: Feliz cumpleaños blog. Me has hecho mucho bien. Me has dado muchos regalos valiosos. Me has hecho conocer personas que adoro. Gracias ♥ (momento blandito). 

Decisión de último minuto 11:02 am: voy a sortear una de las fotos de mi tienda entre los que me dejen un comentario en este post. No puedo dejar pasar este cuarto cumpleaños sin celebrarlo con cariño.

Cómo los trata el 2010 hasta ahora? Yo me despedí del 2009 lo mejor que pude porque no fue un año malo conmigo. El 30 tuvimos invitados a cenar en casa a cuatro amigos queridisisisisimos y para mi esa fue nuestra cena de fin de año por eso le puse la misma dedicación, esmero y amor. El 31 salimos a un viajecito corto por carretera nosotros cuatro solos. Evitamos las autopistas y en el carro comimos esta delicia que hizo Valeria (la vida es buena):
Rodamos por el borde del río Saint Laurent y vimos patos, gansos y granjas de búfalos y caballos y casas con pequeños muelles, y marinas y más marinas que lucían fantasmales cubiertas de nieve.
El cielo gris y el frío le daban un aire misterioso a una región que en verano debe ser super dinámica. A veces parecíamos los únicos en aquella carretera. Le dije a Lau que una de mis cosas favoritas de vivir en Montreal es que a pesar de que llevamos 4 años y medio aquí y hemos recorrido mucho, cada vez que salimos a un paseo descubro otra zona interesante y fotogénica. Siempre hay una sorpresa, cuanto más veo más me falta por ver. En la tarde llegamos a Cornwall, una ciudad-pueblo fronteriza que tiene un puente inmenso para cruzar a Estados Unidos.
La cena en Cornwall fue muy rica y de postre nos fuimos a un sitio cercano para ver un despliegue de miles de luces de Navidad y dimos una caminata por la nieve chocolate caliente en mano, esquivando carrozas tiradas por caballos, turistas y fotógrafos con trípode. Yo no tengo fotos pero para que se den una idea pueden hacer click aquí y aquí. Nuestro hotel esa noche tenía una decoración festiva que me encantó. Sin embargo afuera miles de cuervos estaban posados sobre las copas de los árboles del bosque de atrás y bajo la luz amarilla de la nevada la cosa parecía una película de Tim Burton. En el hotel había una gala de fin de año de esas a las que la gente va con vestido largo y estolas de piel. También había una piscina interior grande con ventanales a través de los cuales se podía ver la gran nevada estando sumergido en agua tibia. Me pareció muy divertido ver en un momento dado en el pasillo donde estaba nuestra habitación, parejas vestidas de gala, gente en ropa de nieve y a Valeria en bikini tapándose con una toalla pequeña y chorreando agua :)  

Nosotros no fuimos a la fiesta. Nos acostamos nuestras divinas camas con nuestros divinos pijamas a ver el concierto de despedida del año en Time Square comiendo chucherías. A media noche nos dimos besitos y apagamos la luz para dormir diez horas exquisitas mientras afuera seguía nevando. El día de año nuevo lo pasamos con nuestros otros amigos queridos en el chalet que ellos tenían alquilado por las vacaciones. Quedaba al borde de un lago totalmente blanco, rodeado de pinos, con una quietud de otro planeta. Ellos nos consintieron con un almuerzo-cena de película porque en esa casa se cocina estilo chef. Fue un día de hablar tonterías, probar esto y aquello, jugar cartas y poner alguna piecita en el rompecabezas gigante que ellos estaban armando. Al llegar a casa me lleve varias sorpresas pequeñas seguidas. Una de ellas es que había enviado una de mis fotos a un grupo de flickr pensando que era una asignación mensual normal como las de La Vuelta al Mundo y resulta que tenía premio y quedé finalista así que me dieron un certificado de $100 para comprar equipo :) No sé si esto sera señal de que el 2010 piensa ser amable conmigo y no batirme contra el piso como, por ejemplo, el 2007. Vamos a ver. Yo soy de las que deja el árbol puesto forever pero esta vez guardé rapidito todos los adornos porque sentía que eso me estaba impidiendo psicológicamente lanzarme de cabeza a otras cosas divertidas, como unos cambios que estamos haciendo en mi casa y los cumpleaños de mis hijas (Marianne quiere algo un pelín especial esta vez porque cumple 15 y Valeria les pide que vayan haciendo sus muñequitos de nieve para su concurso anual). Pero sobre todo estoy atacada de la emoción porque este viernes empieza mi primer* curso online de fotografía!!!!!!! No puedo de la felicidad, me va a dar algo!!! 
Muchas gracias a todos los que se inscibieron ♥ Este año tiene cara de simpático :)  


Perdón por hacerlos leer tanto.  


(*El segundo Atelier es en Febrero. Información aquí. Inscripciones aquí.)